Entre tacones, vestidos y prendas escotadas desfilan estas pequeñas ante la mirada de miles de espectadores. Son niñas que quieren ser adultas, se visten, caminan y hasta quieren pensar como ellas.
Muchas veces este comportamiento es producido por sus mismos padres, quien ven en sus pequeñas el que puedan cumplir un sueño frustado de su infancia, como el hecho de ser modelo. Estas niñas saltan la etapa de los juegos y el aprendizaje para convertirse en títeres de una industria que sexualiza a las féminas. La capacidad de pensamiento y criterio propio se ve rechazado ante una conducta que traza un único camino de apariencia. Las pequeñas sufren el riesgo de convertirse en jóvenes o adultas plásticas, cuyo relleno sólo puede plasmarse en rostros envueltos en maquillaje, pero con mentes vacías.
Hipersexualismo Infantil ¿Qué es?
Puede definirse como la mercantilización del cuerpo o la erotización de la infancia, implica basar el valor de una persona por la necesidad de gustar mediante comportamientos y roles inapropiados a su edad.
¿Por qué se produce?
La cantidad de informaciones a las que están sometidos las niñas debido a la industria publicitaria por medio de los diferentes medios de comunicación, hace que se encuentren expuestas a esta influencia de la moda y el modelaje. Así, mientras otras pequeñas se preocupan por dibujar, jugar o bailar, estas niñas buscan parecerse a esas figuras que aparecen en las revistas y en la televisión, llegando inclusive a cumplir ciertas dietas para mantener un cuerpo esbelto.
Los padres también pueden ser uno de los causantes de la hipersexualidad en la infancia, ya que, muchas madres ven en sus niñas el deseo de cumplir un sueño que no pudieron hacer cuando tenían su edad, por lo que las someten a rutinas fuertes de maquillaje, modelaje y desfiles, sin antes tomar ciertas precauciones.
¿Cuáles son las consecuencias que puede producir?
Unas niñas que se han volcado en el mundo de tacones, vestimentas escotadas y maquillajes a una edad muy temprana, sin que antes se tome prioridad del desarrollo de otras habilidades motoras, sociales, emocionales, artísticas e intelectuales, hace que salte una etapa tan importante como la infancia, un momento único e irrepetible, algo que sólo vivirán una vez en la vida.
Estas pequeñas pueden convertirse en jóvenes con una mentalidad vacía y superficial, preocupadas sólo por la apariencia, por lo que pueden tener también problemas de socialización y ser débiles ante situaciones, especialmente en las relaciones de pareja, ya que, por lo general, crecen en una especie de burbuja, impidiendo que desarrollen un pensamiento propio.
En algunas niñas que están sometidas a grandes presiones en el mundo artístico,especialmente aquellas que se han convertido en unas estrellas de la moda, pueden sufrír a futuro depresión, ansiedad o problemas de adicción porque han sido durante toda su vida unas máquinas a merced de lo que sus padres desean y no tienen la oportunidad de disfrutar como un infante normal.
¿Cómo prevenirlo?
Los padres, en general, deben dejar que sus hijas desarrollen todas sus capacidades y disfruten cada una de sus etapas, no apurar ninguna de ellas. Es importante que desde niñas se les enseñe a valorarse como personas tanto externa como internamente para que nadie pueda humillarlas por ninguna circunstancia.
Fomentar valores como el amor, respeto, tolerancia e inclusión en las niñas. Si tienes una pequeña en alguna agencia de modelaje, no permitas que la sexualicen con respecto a la vestimenta ni que la sobrecarguen de maquillaje, apuesta y defiende por lo natural.
Es normal que se quiera maquillar o pintar las uñas de vez en cuando, el problema está cuando toma esta postura seriamente y le preocupa el cómo se ve, cuando durante su infancia sólo debe preocuparse por jugar o pintar.