Influencia de la música en los bebés

La música es un recurso estupendo en el desarrollo de las capacidades físicas y psicológicas del bebé, desde que se encuentra en el vientre materno, ya que está comprobado que a partir del quinto mes pueden escuchar los sonidos que vienen de fuera, así como voces, por lo que hablarle y estimularlo con música durante este tiempo resulta muy beneficioso.

Se sabe que la música desde hace muchos años es reconocida por sus privilegios, por lo que en la actualidad se ha implementado, especialmente en los bebés. Diversos estudios científicos han comprobado que escuchar música desde los primeros meses de gestación permite que puedan desarrollar ciertas habilidades musicales.

Es importante que el tipo de música que se les coloque, sea lo más relajada posible, como el caso de las mas clásicas, porque estas lo tranquilizan, los expertos recomiendan a Mozart, Vivaldi, Beethoven, Bach o Tchaikovsky.

¿Qué es el efecto Mozart?

Se refiere a la serie de beneficios que ofrece escuchar las melodías compuestas por Wolfgang Amadeus Mozart. Uno de estos privilegios según los estudios es la inteligencia, por lo que si en un adulto resulta estupendo, en los bebés es el doble, debido a que su cerebro es mucho más liberado en cuanto a información y son capaces de retener mucho más que los demás.

Esto ocurre porque los sonidos de sus melodías son puros, armónicos y los ritmos, así como otros elementos de su música parece que estimulan el cerebro humano, activando las neuronas. Una de las más recomendadas es La Sonata para Dos Pianos en Re Mayor

Beneficios de la música en los bebés

Escuchar música tiene muchos privilegios en los bebés recién nacidos o desde que están en el vientre materno, ya que además se ha demostrado que después del nacimiento son capaces de reconocer los sonidos que escucharon durante ese tiempo.  Entre los grandes beneficios que aporta esta forma artística se encuentran:

Tiene un efecto relajante, por lo que reduce los niveles de estrés y ayuda a conciliar el sueño, además que produce cambios a nivel fisiológico, es decir :ritmo cerebral, circulación, respiración, digestión, metabolismo, tono muscular, sistema inmunológico o actividad neuronal.

Por otra parte, estimula su inteligencia emocional. Despierta y desarrolla emociones que pueden modificar el estado de ánimo del bebé y promoverle a la reflexión

Se desarrolla un vinculo fuerte entra la madre y el hijo, igualmente el padre, por lo que se recomienda que durante estas sesiones de música también se encuentre presente, además, de ser posible ambos deben hablarle o cantarle.

Por otro lado, favorece el desarrollo psicomotor, permitiendole un mayor movimiento y equilibrio, para prepararse al dar sus primeros pasitos.

Además, contribuye al desarrollo de habilidades músicales como el canto, y facilita el aprendizaje en cuanto a la capacidad de tocar instrumentos y componer ritmos.

Ayuda a desarrollar la memoria, concentración y autocontrol, por último podría decirse que facilita la imaginación y creatividad.

Tipos de música o sonidos recomendados

La música más recomendada es la clásica, como las compuestas por Mozart,  Vivaldi, Beethoven, Bach o Tchaikovsky. En general, aquellas que sean suavees y relajantes o que tengan presente algunos sonidos de la naturaleza. También es importante hablarle o cantarle, tanto la madre, como el padre.