Nada mejor que mover el cuerpo al ritmo de la música y es algo que les fascina también a los niños. Desde muy temprano comienzan a moverse al escuchar algún sonido que les encante y es algo prácticamente inevitable.
De hecho, algunos niños se sienten muy alegres al momento de bailar, su rostro se pinta con una hermosa sonrisa, ya que el baile es una excelente forma de relajación y entretenimiento, tan esencial para evitar el estrés y la ansiedad.
¿Qué es el baile?
Podría definirse como un movimiento que implica diferentes partes del cuerpo, como: manos, piernas, pies,brazos y que va al ritmo de una música determinada.
¿Qué música puedes colocarle?
La música dependerá de la edad que tenga tu hijo o hija, existen unas que son suaves y pueden resultarle relajante, mientras hay otras más movidas que le harán mover mucho más.
¿Desde qué edad comienzan a bailar?
Desde que tienen aproximadamente los 6 meses de edad, algunos a sus 7 u 8 meses ya comienzan a realizar algunos movimientos cuando escuchan una música, especialmente con sus dos piernitas como si se agacharan ¿Suena familiar?
A partir de los 12 o 16 meses, cuando ya dan pasos más firmes, estos movimientos comienzan a ser más sostenidos y cuando ya cumplen sus 2 años, parecen que ya el ritmo está en su cuerpo.
Entre sus 4 y 6 años ya han desarrollado mucho más su ritmo y es el momento ideal para comenzar a inscribirles en grupos de danza, ballet y demás.
¿Cómo inculcar el baile en los niños?
A los más bebitos se les puede realizar movimientos con su cuerpo, siempre apoyados en los brazos de mami, como mecerles o imitar algunos pasos, siempre sosteniéndole. Cuando son más grandes conviene dejar que empiecen a tener sus propios pasos, pero podemos ayudarle para que vayan imitando (no válido para padres que no bailen bien, por favor, es por el bienestar del niño) ¡Mentira! el baile es para disfrutar padres, no se enojen.
Una vez que ya tienen sus 6 añitos aproximadamente, una buena formas de animalarles a que practiquen esta disciplina tan beneficiosa y movida, es a través de grupos de danza, ballet, entre otros… Allí aprenderán a coordinar mejor sus movimientos, al tiempo que aprenden a ser más responsables, disciplinados y constantes, también desarrollan habilidades de interacción y cooperación, entre otros.
Es importante acotar que indistintamente si tienes un niño o niña, el baile es universal y no distingue sexos o géneros. Es una práctica que le resultará muy beneficiosa y además le ayudará en el futuro, es decir, en su juventud o adultez ¿Quién no le encanta bailar con alguien que sepa hacerlo a la perfección?
Beneficios del baile en los más pequeños.
Son tantos los privilegios que tiene bailar, que intentaremos resumir las más importantes:
El baile es utilizado con excelente resultados para el tratamiento de algunos trastornos de desarrollo en la infancia, estimula la circulación sanguínea y el sistema respiratorio, favorece el desarrollo muscular y la forma de la columna, por lo que ayuda a corregir las posturas, ejercita la coordinación y el equilibrio, permite combatir la obesidad infantil, además desarrolla la expresión corporal, el oído y la memoria, favorece la disciplina, responsabilidad y constancia, y por último incentiva su capacidad de socialización.